Los Angeles, Enero 31 del 2024
…Y sin planes solo quedan las excusas.
Hace unos cuantos días comenzó el ciclo escolar en Guatemala, y en los diferentes chats de amigos que viven en la ciudad de Guatemala en los que participo, la constante de ese día fue: la queja acerca del enorme trafico que había esa mañana llena de buses y de carros que llevaban a nuestro niños a la escuela. También comentaron las diferentes maneras de paliar la situación, por ejemplo, alguien propuso empezar a salir de su casa a las 4 AM, otro propuso para si mismo empezar a usar su moto y así se desarrollaron los chats entre la queja y las soluciones de cada quien.
Empece a preguntar si las autoridades habían advertido algo al respecto, si habían anunciado algunas medidas como parte de un plan y mencionaron de que no se había sabido nada, se sabia que el ciclo escolar iba a empezar pero no se menciono nada al respecto del trafico que se iba a generar. Y pensé: Esto se repite cada año.
Vi esta situación reflejada en todo tipo de actividades sociales que todo el tiempo se repiten, sufrimos como sociedad los embates de alguna situación y nos alertamos de ella ya cuando tenemos el agua hasta el cuello, no advertimos antes, no prevemos, pero en el caso del trafico por mucho que individualmente hagamos planes con anticipación estos servirán de poco, ya que el trafico es un hecho colectivo que lo que requiere es armonizar, balancear a los viajeros para que se lleven el menor tiempo posible en la infraestructura dada.
Para ello hay autoridades, hay entidades con presupuestos para que se encarguen de estos asuntos, pero el problema esta cuando estas autoridades, estas entidades no tienen planes, ya sea de contención o de mejoramiento de cierta circunstancia, y sin planes solo quedan las excusas, las distracciones, las manipulaciones pero el problema ahí sigue.
Podemos irnos a cualquier otro tipo de actividad que requiera de planes, de consenso, de ordenamiento, de balance en la sociedad, que las autoridades por lo general carecerán de planes en marcha para mejorar tal o cual situación, haciendo entonces que la clase política de Guatemala sea de por si inútil al no ejercer las funciones para las que fueron creadas las instituciones y para las que se les paga a los funcionarios políticos. ¿Y porque la clase política? Por qué es precisamente eso en lo que la política debe de ocuparse. Por ejemplo, el historiador puede tener fotos de cómo era la infraestructura en el pasado y nos pueda describir como era la manera en la que se transportaban los habitantes de esa ciudad en el pasado. El periodista nos cuenta cómo esta la situación en este preciso momento, salen ahí en la radio y en las noticias contándonos de que ya empezó la escuela y que hay mucho trafico en tales y cuales puntos de la ciudad. Pero también esta el político y más aun si es funcionario publico que nos debe indicar qué es lo que va a pasar, cuál es el plan.
Las autoridades tienen presupuesto para ocuparse de ello, prever, hacer planes, analizar riesgos, comunicar los planes para armonizar a la sociedad, si no hacen eso, si no prevén, la clase política no es más que un parásito. Así que ciudadano si vives una situación en este momento, voltea a ver al funcionario correspondiente y pregúntale cual es el plan, si no lo tiene, exige que lo haga o que renuncie, Por cierto mejor si ese reclamo lo haces en comunidad organizada junto con otros ciudadanos, para que tenga más peso.
@luidonisblog